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Urgencia por incendio forestal en la Reserva Natural de las Aves El Dorado en la Sierra Nevada de Sa

Grave incendio forestal se presentó en la parte baja del Cerro Kennedy, del cual se ha intentado controlar los últimos focos por parte del equipo de guardabosques de la Fundación ProAves.

La Fundación ProAves de Colombia ha estado informando con insistencia todos los pormenores de un grave incendio forestal que inició desde el pasado 9 de marzo de 2016 y que se creía controlado (hasta el día de ayer, 16 de marzo) en el sector de la Cuchilla de San Lorenzo, Sierra Nevada de Santa Marta. El día de ayer en la madrugada, fuimos notificados por nuestro equipo en la zona que se activaron de nuevo dos focos del incendio en la parte alta y baja del Cerro Kennedy.

El lugar de los hechos, es en La Reserva Natural de las Aves El Dorado en el sector de la Laguna de San Lorenzo, laguna considerada sagrada por los indígenas y que viene siendo protegida por la Fundación ProAves. Además, por su importancia biológica es un lugar catalogado como un sitio AZE (Alianza para la Cero Extinción - en español); así mismo, La Sierra Nevada de Santa Marta fue declarada por la UNESCO como Reserva de Biosfera y Patrimonio de la Humanidad en 1979 y se considera un lugar único en el mundo debido al aislamiento con respecto a la cordillera de los Andes.

El incendio del que aún se desconocen las causas de su origen, afectó unas 50 hectáreas de la Reserva El Dorado, perjudicando bosques muy importantes por ser el hábitat único de especies animales y vegetales endémicas; y un gran número de estas, se encuentran en peligro de extinción. Dentro de las especies más amenazadas de aves que se localizan en la reserva están: el Periquito de Santa Marta (Pyrrhura viridicata), el Atrapamoscas de Santa Marta (Myiotheretes pernix), el Colibrí Ala de Sable de Santa Marta (Campylopterus phainopeplus), la Guacamaya Verde (Ara militaris), el Arañero de Santa Marta (Basileuterus basilicus), el Chamicero Serrano (Synallaxis fuscorufa), el Tororoi de Santa Marta (Grallaria bangsi) y el Arañero Embridado (Basileuterus conspicillatus); entre otras.

Entre especies vegetales para preservar en la reserva están: la Salvia de San Lorenzo (Salvia libaneses), el paraguas (Gunnera tayrona) y los pinos nativos (Podocarpus oleifolius y Prumnopitys montana); entre los mamíferos, el mono nocturno (Aotus sp) y el puma (Puma concolor). Adicionalmente, 14 especies de ranas y sapitos endémicos de la Sierra Nevada de Santa Marta entre las que se destacan dos especies de sapitos arlequines (Atelopus nahumae) y (Atelopus laettisimus).

Al inicio de la crisis ambiental hubo apoyo por parte de diferentes autoridades como el grupo de Bomberos de Santa Marta y apoyo aéreo de la Fuerza Aérea Colombiana con helicópteros adaptados con el sistema "bambi bucket"; sin embargo, una vez controlado el incendio en la parte alta de Cerro Kennedy (donde se encuentra la base militar y fue el inicio del incendio), empezaron a circular noticias que desinformaban de la situación real y actual que se estaba desarrollando, anunciando que el incendio ya había sido controlado, sumando a esto y por otras emergencias similares en el país, no se volvió a contar con ningún apoyo institucional de las entidades encargadas en atender este tipo de emergencias.

Esta tragedia ambiental en la parte baja del Cerro Kennedy (hasta el momento de la emergencia), solo fue atendida por 25 personas del equipo de la Fundación ProAves a través de, un plan de contingencia en el que se usaron 12 tanques de fumigación y el método de cortafuegos. Gracias a las acciones de este enérgico grupo de la fundación es que se logró controlar de forma efectiva gran parte del fuego (hasta el día de ayer, 16 de marzo de 2016).

Ante la situación descrita y viendo la falta de apoyo por parte de las instituciones pertinentes para este tipo de emergencias, la falta de cooperación por el/los funcionario(s) de la sede de Parques Nacionales en el sector de San Lorenzo y ante una eventualidad de esta magnitud, nos tocó trabajar de forma solitaria para acabar con los últimos focos que quedan de este incendio; sin embargo, lamentablemente cuando creíamos que la situación había sido controlado en su totalidad, fuimos informados que en horas de la madrugada se reactivaron dos focos: uno en la parte alta del Cerro Kennedy (donde todo empezó) y otro en la parte baja del mismo cerro (en el que hemos estado trabajando en solitario).

En este momento seguimos trabajando en controlar la reactivación de los nuevos focos pero desafortunadamente, con poco apoyo de las autoridades idóneas para atender este tipo de emergencias. Aun así, queremos dar a conocer nuestra inconformidad como institución que trabaja y vela por la conservación del medio ambiente y la biodiversidad en el país que en este caso y en un lugar tan importante y estratégico como la Sierra Nevada de Santa Marta no se haya desplegado la ayuda que se necesitaba y que posiblemente de haberse concretado, hoy no estaríamos lamentando la pérdida incalculable de hectáreas de bosque y de la biodiversidad asociada a los mismos.

Desde el pasado 12 de marzo, reiteradamente intentamos contactar a las autoridades competentes para este tipo de emergencias (Bomberos de Santa Marta, Defensa Civil Colombiana -Seccional Magdalena- y apoyo aéreo de la Fuerza Aérea Colombiana) con el propósito de que nos ayudasen a apagar los focos que seguían presentes a nivel del subsuelo, pero nunca recibimos una respuesta positiva.

Queremos reconocer y resaltar el gran esfuerzo e interés de nuestro equipo de guardabosques, encabezado por el Director de Conservación de la Fundación ProAves en tratar de apagar este incendio; a todos ellos ¡GRACIAS!

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