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Unidos en la conservación de las fuentes hídricas de Bogotá

Gracias al apoyo de la cadena hotelera BH y The Nature Conservancy (TNC), 42 familias en Chingaza y Sumapaz recibirán una cocina ahorradora de leña por apoyar al mecanismo Agua Somos, en la conservación de las fuentes de agua que abastecen a Bogotá y sus alrededores.

La señora Marta Cortés y su hijo Felipe, habitantes de la vereda Las Margaritas, Km 20 de Usme, Cerros orientales de Bogotá.

Actualmente en nuestro país más del 50% de la población rural utiliza leña para la cocción de sus alimentos ya sea porque el gas no llega a sus veredas o porque extraer la madera del bosque resulta más económico que la compra de pipetas de gas.

El humo contaminante emitido por fogones ineficientes de leña causa enfermedades respiratorias agudas, enfermedades pulmonares obstructivas crónicas, enfermedades bronco pulmonares, cáncer de pulmón, enfermedades en la piel y dilatación cardiaca. En el 2009 alrededor de 1000 muertes de colombianos fueron atribuidas a esta práctica, 800 eran mujeres adultas y 200 fueron niños menores de cinco años.

Al amancer en Usme, kilómeto 18. Foto: Natalia Gónima

La cocina ediciente PRIMA, que consume 60% menos leña y emite 90% menos humo, se diseñó en el marco del Progama Paisaje de Conservación, financiado por USAID y ejecutado por Patrimonio Natural, con el fin de disminuir el humo contaminate así como la presión sobre el bosque seco tropical, ecosistema en peligro de extinción.

El mecanismo Agua Somos, implementado por Patrimonio Natural, el fondo colombiano más grande en Colombia que promueve inversiones para la conservación, ha estado trabajando en los últimos dos años de la mano de 61 familias campesinas en Chingaza y Sumapaz que se compremetieron a aislar de 3 a 25 metros de su predio para proteger las rondas de los ríos que suministran 85% del agua de la capital.

Como incentivo a la conservación estas familias recibieron bebederos para sus vacas, árboles, capacitaciones y todo lo necesario para construir las cercas que evitan que el ganado se meta al río y paste en sus orillas.

Aislamieto de la ronda del Río chisacá, kilómetro 22, de Usme.

Según Liliana Martinez, coordinadora del mecanismo, además de proteger el agua, "Agua Somos tiene otros proyectos de producción sostenible donde se trabaja la ganadería sostenible y agricultura de conservación ofreciéndole alternativas a los propietarios para que hagan un cambio de actividades hacia una línea mucho más amigable con los ecosistemas naturales y con las zonas de recarga hídrica".

Es el caso del señor José Manuel Narvaez Muñoz quien construyó un cultivo de truchas arcoiris con una infraestructura sostenible que utiliza el agua del río Chisacáque pasa por su predio, en la vereda Las Margaritas, de tal manera que el agua vuelve limpia al río.

Predio del señor Narvaez, donde constuyó el criadero de truchas Arcoiris con ayuda de Agua Somos. Foto: Natalia Gónima

Don Manuel vive en el kilómetro 19, de Usme, con su esposa Luz Mery Cardona Rodríguez, en una casa grande de madera que él construyó y trabaja con Agua Somos, porque como él mismo dice:

"Soy un convencido de restablecer el medio ambiente, todo lo que es la orilla del río lo que más se pueda porque ahora sí llegó la sequía, la gente antigua derribó todo lo que había a la orilla del río y toca restablecer eso, a ver si cambia el clima o qué vamos a hacer".

Manuel Narvaez y su señora Luz Mery cardona. Foto: Natalia Gónima

Como Don Manuel, la señora Marta Cortéz recibió hace un par de meses una cocina eficiente PRIMA, modelo soltera, que incorpora chimenea, como incentivo a la conservación del agua y el bosque.

Según dice, ella firmó los acuerdos de conservación porque, "realmente se han visto mucho, o sea, los ríos, aguas, manantiales, pelado sin arbolitos, sin nada y por eso estamos haciendo una campaña de que todo el mundo se asocie a tener cuidado con todos los clases de manantiales de agua, con árboles, sembrandole árboles y así...".

La señora Marta Cortéz con su cocina eficiente. Foto: Natalia Gónima

Otra beneficiaria, Anadelina Orjuela Moreno, vive con su mamá y su hermana en Sumapaz de la venta de la leche y recibió la cocina eficiente, pues hace un año cedió cinco metros de su terreno para aislar las rondas de los ríos. Según dice, ella conserva para "no contaminar más agua y para proteger más los bosques".

Hasta ahora se han entregado la mitad de las cocinas eficientes, 10 en Chingaza y 12 en Sumapaz. Durante el mes de febrero se entregarán las otras 20 cocinas eficientes.

Anadelina Orjuela con su cocina eficiente soltera con chimenea para que el humo no se quede adentro de la casa. Foto: Natalia Gónima

Recomendamos leer, "¿Qué ha pasado con Agua Somos?":

http://especialespatrimon.wix.com/patrimonionaturalcol#!%C2%BFQu%C3%A9-ha-pasado-con-Agua-Somos/cu6k/562e451e0cf27ade992c4602

Para más información sobre PRIMA, la cocina eficiente, visite: http://especialespatrimon.wix.com/cocinaeficiente

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